HUMANIDAD Y COSMOS es un programa que trata de traerle a usted eso que siempre se preguntó y nunca tuvo la oportunidad de escuchar… Hechos históricos ocultados, fenómenos insólitos, creencias, mitos y leyendas, arqueología proscripta, seres extraños, energías prohibidas, noticias curiosas, científicos censurados, el misterio de los objetos voladores no identificados, profecías y vaticinios, sociedades secretas, ecología, enigmas y soluciones para vivir física y espiritualmente sanos.


domingo, 5 de agosto de 2012

HOMBRE DE 60 AÑOS FOTOGRAFÍA A LA CRIATURA DEL LAGO NESS DESPUÉS DE 26 AÑOS HACIENDO GUARDIA

Los rumores de un presunto gran animal o monstruo que habita en el lago Ness, de Escocia, han circulado durante siglos desde hace 1.500 años, aunque la precisión, credibilidad y veracidad de tales historias siempre se ha cuestionado. Muchos habitantes locales argumentan a favor de su existencia, sin embargo algunos escépticos sugieren que estos rumores de Nessie existen en su gran mayoría para favorecer a la industria del turismo y al folclore local.

La mayoría de los científicos y otros expertos afirman que las pruebas que apoyan la existencia de Nessie no son convincentes, y consideran dichos informes fraudes o identificaciones erróneas de criaturas reales. Lo curioso es que ningún científico se ha tomado su tiempo para ir en persona a realizar una investigación, por ende, todos los datos provienen de quiénes han decido ir al lago escocés a investigar por sí mismos.

Ahora, un "cazador" logró capturar una de las mejores imágenes que se pudieron observar hasta el momento del legendario ser. El sujeto se pasó los últimos 26 años de su vida haciendo guardia durante más de 60 horas a la semana en busca de la presencia estelar del mítico animal.

La criatura del lago Ness registrada por
George Edwards, al fondo,
el castillo de Urquhart.
El “cazador” del monstruo del Lago Ness, George Edwards, de 60 años, asegura que logró fotografiar a la criatura durante un paseo en su barco Nessie Hunter IV (Cazador de Nessie) con turistas a bordo buscando rastros dejados por la criatura.

En su foto se aprecia una extraña joroba que sobresale del agua, prueba -según él- de que la criatura existe. “Se movía lentamente por el lago hacia el Castillo de Urquhart, y era de un color gris oscuro. Estoy convencido de que estaba ante Nessie, pues yo creo en estas criaturas. Demasiadas personas las vieron durante demasiado tiempo”, dijo Edwards. Estoy convencido de que hay varios monstruos, agregó.

Edwards, cree que esta es la mejor imagen jamás tomada de la criatura legendaria. Su foto fue incluso verificada por expertos militares estadounidenses que creen que podría ser real.

"Estaba por volver al puerto cuando fui a la parte trasera del barco y lo vi. Estaba moviéndose lentamente a través del Castillo Urquhart. Tenía un color gris oscuro. Estaba a medio kilómetro de distancia, pero es difícil darse cuenta exactamente en el agua", afirmó Edwards.

La fotografía fue tomada a las 9 de la mañana del 2 de noviembre de 2011, pero Edwards la publicó recién ahora, porque antes la mandó a Estados Unidos para que la analizaran militares norteamericanos.

"No quería mencionar lo que había visto hasta estar seguro de no haber fotografiado un tronco o algo inanimado flotando en el agua", precisó Edwards.

Marcus Atkinson obtuvo esta imagen
alargada cerca del fondo del lago.
Luego de Edwards, la última detección de Nessie, fue el 20 de abril de 2012, cuando Marcus Atkinson, el dueño del barco que traslada a los turistas hasta el lago Ness, informó haber logrado captar en su sonar una imagen de algo que podría ayudar resolver el enigma sobre la existencia del mítico monstruo.

Los expertos ya han descartado que el “avistamiento” sea cualquier otro pez, foca o residuos en el lago. La imagen granulada del sonar representa una larga “criatura como serpiente”, muestra unos objetos vivos grandes y desconocidos bajo el agua profunda.

El ser misterioso se grabó a una profundidad de 75 pies en el agua turbia y mide casi 5 pies de ancho. La imagen se produjo cuando su nave se encontraba en Urquhart Bay y mostró un objeto largo que siguió al barco durante más de dos minutos.

La foto tomada con el teléfono móvil del Sr. Atkinson de su pantalla del sonar, le ha ganado un cierto reconocimiento. Atkinson, de 43 años, de Fort Augustus en las Highlands escocesas, dijo: “Yo estaba bajando los clientes en el Castillo de Urquhart y luego saqué mi barco del camino para las otras compañías de excursiones.

“Me moví en el agua y miré el sonar y vi que había aparecido esta imagen. El dispositivo toma una lectura de la profundidad y lo que está por debajo del barco cada cuarto de segundo y acumula gradualmente una imagen, por lo que cubre un tiempo de aproximadamente cinco minutos. El objeto se hacía cada vez más grande y tomé una foto con mi teléfono móvil", dijo.

Mapa del lago Ness.
“No hay nada tan grande en el lago. Yo estaba en shock, ya que parecía como una serpiente grande, es increíble. No se puede fingir una imagen de sonar. Nunca he visto nada como esto en el buscador de peces. Es una forma extraña para mí. Se la he mostrado a otros navegantes experimentados y ninguno de nosotros sabía lo que era. He visto un montón de fotos en 21 años de estar aquí, pero esta es la imagen más clara. Sin duda, hay algo en el lago”, afirmó Atkinson.

Por su parte, el Dr. Simon Boxall, del Centro Nacional de Oceanografía de Southampton, dijo: “La imagen muestra una floración de algas y zooplancton que existiría en lo que sería una termoclina. El zooplancton vive de estas algas y refleja muy bien las señales de sonido de ecosondas y localizador de peces. Ellos aparecen como una ‘burbuja’ lineal en la pantalla, al igual que esto. Este es un monstruo compuesto por millones de pequeños animales y plantas y representa la mayor parte de la vida en el lago”.

Las características del Lago Ness
El lago es un alargado canal de agua que se extiende por 40 kilómetros por unos 2 kilómetros de anchura (en su parte más ancha 2.8) y muy profunda (en varios alcanza los doscientos veinticinco metros), relleno con el agua dulce que le suministra el río Ness que desemboca no lejos de uno de sus extremos.. Sus aguas son ligeramente cálidas en la superficie y muy frías a medida en que se desciende. Las montañas le bordean con acantilados que proyectan una imponente sombra sobre las aguas. Hay sitios en que a pocos metros de la orilla la profundidad llega a los 200 metros, lo que hace de difícil la investigación.

Una teoría que defienden los creyentes de Nessie, es que el lago tiene profundos canales subterráneos que lo comunican con el mar, por los que los monstruos entran y salen a su antojo, justificando así las largas ausencias entre sus apariciones. La superficie del lago está casi siempre tranquila, por lo que esta ausencia de olas hace más fácil la observación.

Cronología de los avistamientos en el lago Ness
La historia de las apariciones del enorme animal lacustre es la siguiente:

La más antigua referencia conocida sobre una misteriosa criatura presente en el río y lago Ness, sería el relato de la Vida de San Columbano, donde se describe cómo en el año 565 San Columbano (521-597), evangelizador de Escocia, habría salvado a alguien que supuestamente estaba siendo atacado por un monstruo en el río Ness.

Las leyendas escocesas hablan de los
kelpies, míticos caballos acuáticos.
Igualmente algunas personas han asociado como primeras referencias, a antiguas leyendas locales sobre unos míticos caballos acuáticos llamados kelpies; que se dicen habitarían en las profundidades de este lago.

La primera descripción moderna sucedió en 1868. Un artículo publicado ese año en el Inverness Courier, es el primero en referirse sobre rumores acerca de la existencia de un "pez enorme u otra criatura" en la profundidad de las aguas. Luego de pasar muchos años; en 1930, el periódico The Northern Chronicle, publicó una noticia titulada "Una extraña experiencia en el lago Ness" en la que se detalla la historia de dos pescadores que se refieren a un animal que produjo un gran remolino cerca de Tore Point.

En 1932, K. MacDonald afirmó que había visto a una criatura similar a un cocodrilo remontando el río Ness.

El artículo definitivo sobre la teoría del monstruo del lago Ness, fue el avistamiento que habría tenido lugar el 2 de mayo de 1933. El periódico Inverness Courier publicó la noticia de una pareja local que dijo haber visto "un enorme animal rodando y hundiéndose en la superficie". El informe del "monstruo" (título elegido por el editor del Courier) se convirtió en una sensación entre los medios. Las editoriales de Londres comenzaron a enviar reporteros a Escocia, e incluso un circo ofrecía una recompensa de 20.000 libras esterlinas por la captura del monstruo.

Más tarde ese mismo año, A. H. Palmer, quien atestiguó un avistamiento de Nessie el 11 de agosto de 1933, a las 07:00 AM, describió a la criatura como teniendo su cabeza —a la que consideró como estando de frente— al ras del agua. Su boca, que tenía una anchura de entre doce y dieciocho pulgadas (30 a 45 centímetros), se abría y cerraba; la abertura máxima de su boca era estimada en cerca de seis pulgadas (15 centímetros). Hasta este momento los periódicos hablaban simplemente de un pez misterioso o extraña criatura, y no se referían a la criatura como un ser prehistórico. Siendo descrito por primera vez como un monstruo prehistórico, por una pareja de turistas (los Spicer), poco después del estreno de la mundialmente famosa película King Kong.

El 2 de noviembre de 1933, Mary Hamilton, reportó que también observó al monstruo.

Foto de Nessie tomada por Hugh Gray,
en 1933, a 60 metros de distancia.
El 13 de noviembre de 1933, Hugh Gray, un empleado de la British Aluminium Company, realiza, a una distancia de 60 metros, la primera fotografía de un gran objeto que aflora en la superficie. Su publicación hace subir la fiebre del monstruo hasta niveles cada vez más altos. La foto, sin embargo es muy confusa, y los escépticos sugirieron que podría tratarse de un tronco de árbol o de una masa de vegetación, en vías de descomposición.

La foto de Wetherell
La preocupación moderna por la criatura, ya conocida como un monstruo prehistórico del Lago Ness, fue despertada por la fotografía presuntamente tomada por el cirujano Robert Kenneth Wilson el 19 de abril de 1934, que parecía mostrar a una enorme criatura de cuello largo que se deslizaba a través del agua. Décadas más tarde, surgieron las confesiones de Chris Spurling, yerno de Marmaduke Wetherell, que le confesó en su lecho de muerte que la foto era trucada.

El 12 de marzo de 1994, Marmaduke Wetherell, experto en caza mayor, poco antes de morir, afirmó haber falsificado la fotografía tras ser empleado por el periódico Daily Mail para encontrar a Nessie; indicando también que Wilson no habría tomado la foto, y que su nombre fue utilizado solamente para darle más credibilidad a la misma. Sin embargo y a pesar de la confesión, esta foto ya había sido difundida por todo el mundo como una "evidencia absoluta"; lo cual colocó definitivamente en la cultura popular, la leyenda del Monstruo del lago Ness de Escocia.

La famosa foto de 1934 de R. K. Wilson.

Spurling afirmó que dicha fotografía, la cual inspiró un gran interés popular por el monstruo, era en realidad un montaje de arcilla pegada a un submarino de juguete. Marmaduke Wetherell realizó una broma y trabajó en el muñeco con Chris Spurling (su yerno según lo mencionado) quien era un especialista en la escultura, Ian Marmaduke (su hijo) quien compró el material para el Nessie falso, Maurice Chambers (un agente de seguros) quien llamaría a Robert Wilson (un cirujano) para que publicara las fotografías. Mucho antes de las afirmaciones de Spurling, otros ya habían declarado verdaderas las fotografías, y habían sugerido que la fotografía podría corresponder a un plesiosaurio o alguna especie de dinosaurio acuático. Sin embargo, a pesar de las confesiones de Chris Spurling, algunas personas todavía creen que las fotografías son reales, argumentando el hecho de mostrarse dos fotografías que representan dos poses ligeramente diferentes. Los defensores, entre ellos personas dedicadas al análisis de fotografías, indican que este hecho es válido para decir que Nessie existe y que puede ser que exista más de un plesiosaurio.

Lo interesante es que a través de los años, distintas personas siguieron obteniendo fotos del monstruo e incluso, fue detectado con aparatos electrónicos, por ende, que la foto sea falsa no significa que la criatura no exista.

Fotograma de la filmación de Dinsdale
en el lago Ness en 1960.
En abril de 1957, se publica el libro More Than a Legend de Constance Whyte, una colección de todas las pruebas que sostienen la autenticidad del monstruo en el lago que, gracias al éxito que llega a obtener el libro, provoca un imprevisto resurgir del interés por el monstruo del lago Ness. De este modo vuelve a aumentar el número de visitantes a los altiplanos escoceses. Uno de estos, el ingeniero aeronaval Tim Dinsdale, queda tan impresionado por todo el asunto, que decide de inmediato abandonar su carrera de ingeniero, y dedicarse por completo al enigma.

En 1960, Dinsdale rueda unos quince metros de una buena película que muestra un objeto lejano en movimiento: la película fue exhibida en el curso del programa Panorama de la BBC e impresionó notablemente a los espectadores, dejando incluso perplejos a los escépticos. En él se ve una mancha obscura no bien definida que se mueve en el lago, a una distancia de casi kilómetro y medio del operador En 1966, los expertos fotógrafos de la RAF analizaron el filme y concluyeron que mostraba «probablemente un objeto animado».

El submarino Pisces logró hacer contacto
de sonar con algo enorme que huyó.
En 1969 se probó en el lago Ness el sumergible Pisces, de Vickers Oceanics, así como un pequeño submarino privado, el Viperfish, construido por el norteamericano Dan Taylor. Este último tenía la intención de disparar dardos para extraer muestras de los tejidos del monstruo, una vez localizado éste por radar. Desgraciadamente, este submarino no estaba equipado para navegar en aguas turbias. Cuando llegó al fondo del lago logró hacer contacto de sonar con algo enorme que huyó.

Las fotografías obtenidas por Robert Rines
En 1972, un grupo encabezado por el abogado estadounidense Robert H. Rines obtuvo algunas fotografías subacuáticas. Una de ellas era una vaga imagen, quizás de una aleta romboidal (otros han argumentado que el objeto podría ser un grupo de burbujas de aire o una aleta de algún pez). Con base en esta fotografía, Sir Peter Scott (hijo del famoso explorador antártico Robert Scott), uno de los naturalistas más conocidos de Gran Bretaña, anunció en 1975 que el nombre científico del monstruo sería en adelante Nessiteras rhombopteryx (del griego “monstruo de Ness con aleta de forma diamantada”). Esto permitiría que Nessie fuese agregado a un registro británico de la "fauna oficialmente protegida".

Foto de Robert Rines de la aleta del animal.

Las famosas fotografías subacuáticas fueron obtenidas examinando cuidadosamente las profundidades del lago con el radar, sobre el curso de varios días, en búsqueda de actividad subacuática inusual. Una cámara fotográfica subacuática con una luz de alta potencia colocada, (necesaria para penetrar la famosa oscuridad del lago Ness) fue montada para registrar imágenes debajo de la superficie. Varias de las fotografías resultantes, a pesar de su calidad obviamente pésima, parecen de hecho demostrar la existencia de un animal que se asemejaría a un plesiosaurio en varias posiciones. También se obtuvieron algunos acercamientos de lo que se sugiere que es la aleta en forma de diamante, en diferentes posiciones, lo que indicaría movimiento. Sin embargo, la comunidad científica ha descartado estas pruebas.

Imagen de Nessie registrada por el equipo
de Robert Rines en 1972.

La expedición que dirigía Rines provenía de la Academia de Ciencias Aplicadas, y utilizaron un moderno equipo de sonar completado por un sistema de cámara estroboscópica creado por el doctor Harold E. Edgerton, del Instituto Tecnológico de Massachusetts, para fotografiar la vida subacuática. La noche del 8 de agosto la superficie del lago estaba lisa y tranquila, y los miembros del equipo investigador esperaban en embarcaciones ancladas en la bahía de Urquhart, hacia la una de la madrugada el equipo empezó a ver en la pantalla del sonar las pesadas y oscuras señales de un gran objeto en movimiento, la cámara estroboscópica fotografió las manchas captadas por las ondas del sonar, debido a lo turbio del agua, las fotografías no fueron muy nítidas, pero al ser procesadas en una computadora se pudieron definir varias imágenes. Dos de las tomas mostraban una aleta, una tercera foto mostraba dos objetos que parecían ser grandes animales. Los resultados de los análisis de los hallazgos señalaban una aleta que media entre 1.20 a 1.80 metros de largo y dos cuerpos separados por 3.5 metros, esto fue por fin una evidencia palpable de la existencia de uno o algunos seres acuáticos que habitan el legendario lago. Sin embargo, para la “Ciencia oficial” no constituyen pruebas aceptables.

En 1987 se organizó una expedición imponente, conocida como la operación Deepscan. Se trataba de la búsqueda más completa, con sonar de tipo medio, que se había llevado a cabo en el lago. Dos docenas de barcas, equipadas con sonar, una al lado de la otra, a todo lo largo del lago, iban a rastrear toda la superficie del lago, metro a metro. Las mediciones duraron tres días, pero sólo en una ocasión se registró el movimiento de algo grande a gran profundidad; sin embargo, no fue posible identificar su naturaleza.

Encuentran restos fósiles
El 17 de julio de 2003, se informa que se encontraron restos fósiles “perfectamente conservados”  de un dinosaurio que según especularon los paleontólogos, “vivió hace 150 millones de años”. El reporte nos informa que los fósiles del gigantesco animal “fueron descubiertos en las riberas del Lago Ness, en Escocia”.

Dibujo artístico de Nessie.
En la información de este hallazgo, lo primero que hacen los científicos que sirvieron de base para la redacción del artículo es descontar a priori que estos fósiles nada tenían que ver con el “legendario monstruo (plesiosauro) del lago Ness”.

Llama la atención que cientos de personas han grabado en cámaras de filmación, han tomado fotografías y han reportado haber visto un animal gigantesco en las aguas de un gran lago en Escocia, sin embargo, hoy encontramos los fósiles “perfectamente preservados” de otro animal que parece cumplir con la descripción del animal que los informes indican que podría existir coincidencialmente “en el lago Ness de Escocia” y estos escépticos aclaran que nada tiene que ver con el que ven los testigos. 

Castillo de Urquhart, ubicado en la
orilla del lago Ness.

Como podrán notar, los paleontólogos “oficiales” hacen esfuerzos, para hacer creer que los fósiles de dinosaurio hallados provienen de hace 150 millones de años, eso sí “están perfectamente conservados”.

El artículo, por demás de interesante agrega que los fósiles pertenecen a un “vertebrado de cuatro patas perfectamente preservado y que fue un plesiosauro de casi 11 metros”.

No cabe ninguna duda que los plesiosaurios o lo que habite en el lago se han reproducido allí durante miles de generaciones y también han muerto allí y los huesos que hallaron los paleontólogos son los restos de uno de los antepasados de Nessie, que muy probablemente no murió hace millones de años, sino hace unos pocos miles y por eso están tan bien conservado.

Escultura de Nessie en el propio lago Ness.
Tenemos aquí a científicos que se permiten negar la supervivencia de una determinada especie basándose exclusivamente en prejuicios; sobre todo, porque animales contemporáneos de los dinosaurios, como los cocodrilos, las tortugas o los escualos, siguen existiendo en nuestros días. 
 
En 2005, Robbie Girvan vio el cuello y la cabeza de una criatura, que medían algo más de un metro, cerca de la orilla del lago. Según sus palabras, esta criatura "de color verde oscuro y plateado" no podía ser otra que Nessie.

En agosto de 2009, un extraño animal
nadando en el lago Ness fue fotografiado
por el Google Earth.
En 2007, Gordon Holmes, un técnico de laboratorio de 55 años procedente de Yorkshire, vio una criatura con forma de serpiente de color negro azabache y 13,5 metros de longitud, y logró captarla con su cámara.

En agosto de 2009, algo grande nadando fue captado en el lago Ness por el Google Earth.

Richard Preston, un diseñador de jardines, en noviembre de 2010 fotografió una forma misteriosa que podría ser el famoso monstruo del Lago. El hecho ocurrió mientras Preston, de 27 años de edad, trabajaba en los jardines del castillo Aldourie a orillas del Lago Ness y observó sorpresivamente una extraña forma en la superficie del lago.

Foto del extraño animal, tomada por
Richard Preston en noviembre de 2010.
En su declaración a la prensa, dijo: “Yo estaba caminando por los jardines del castillo y vi algo a lo lejos. Al acercarme comencé a percibir claramente las cuatro jorobas características del animal que todos conocen como Nessie. Y en ese momento se me ocurrió tomarle una fotografía para mostrarla y que me creyeran lo que había visto.”

Por sorpresa para Preston lo que sea que haya sido, se quedó el tiempo suficiente para obtener varias fotos antes de que desapareciera repentinamente. Inmediatamente, le mostró las fotos a uno de sus amigos convencido de que había capturado en las imágenes al misterioso monstruo del lago.

La teoría del plesiosaurio
La mayoría de las descripciones modernas sobre el aspecto del monstruo, indican que existiría una criatura que se asemejaría a los extintos plesiosaurios, unas criaturas acuáticas prehistóricas. Así, la descripción moderna que se le da normalmente sería similar a la que presentan los fósiles de plesiosaurios pertenecientes a la era mesozoica; que indican que este animal prehistórico debió ser un animal físicamente enorme, con un cuello alargado, una cabeza pequeña y dos pares de aletas de propulsión bajo el agua.

Nessie sería un plesiosaurio.
Muchos de los criptozoólogos (investigadores que se dedican a buscar animales no aceptados por la “Ciencia oficial”), argumentan que el Lago Ness es un lago con salida al mar durante cierta época del año y que quizás la criatura no sea nativa del lago mismo, sino que viva en el mar e ingrese al lago en ciertas épocas. Solamente resta esperar que algún día sea perfectamente filmado uno de estos ejemplares, un auténtico fósil viviente.

Otro animal
Por otra parte, otros avistamientos no concuerdan con la descripción del plesiosauro o incluso con ninguna otra criatura acuática: en abril de 1923, Alfred Cruickshank afirmó haber visto una criatura de 3 a 3,5 m de largo con un lomo arqueado, similar a un elefante, que cruzaba la carretera frente a él mientras conducía su coche. Otros avistamientos reportan criaturas más similares a los camellos o caballos.

Cuando llegue el momento, el mundo entero descubrirá inesperadamente que existen nuevas especies mucho más excitantes para ser estudiadas, filmadas y preservadas. Ya se trate de un superviviente de la era de los dinosaurios o de una especie completamente nueva, todos reconocerán un día a ese animal indicándolo con el nombre del plesiosaurio del lago Ness, la primera maravilla de Escocia y la octava maravilla del mundo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario