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viernes, 20 de julio de 2012

EL “DÍA DEL AMIGO”, UN INVENTO ARGENTINO

Existe en el año una celebración donde se hace el culto a la amistad. Es en el “Día del Amigo”, ocasión para reunirse y festejar con la gente que uno lleva en su corazón.

Cuando llega el 20 de julio, los amigos al finalizar su jornada de trabajo se encuentran para tomar un café, una gaseosa, una cerveza, comer una pizza, pero lo importante es charlar y compartir un momento con amistades entrañables.

En Rosario, la amistad tiene tanta cantidad de adeptos que no hay bares ni restaurantes que tengan una mesa libre. Por ejemplo, la avenida Pellegrini, el sector cercano a La Fluvial y los locales gastronómicos de la Costanera se muestran atestados de gente en horas de la noche. Lo mismo sucede en los restaurantes y bares de la calle San Martín al sur y en la avenida Alberdi al norte. Otros amigos se reúnen en sus casas recordando anécdotas en torno a una mesa.

Las regalerías céntricas en la víspera se hacen su Julio con las compras destinadas a los seres más queridos. Lo mismo las peluquerías. La celebración del “Día del Amigo” llega al grado tal que las ventas y el movimiento que se registra en la ciudad se comparan con Navidad o Año Nuevo.

En este día, se saturan los teléfonos celulares, las conexiones quedan interrumpidas, también colapsa Internet por el masivo envío de correos electrónicos con saludos. También el correo tradicional registra un inusual aumento de actividad con el envío de cartas y tarjetas.

Una invención argentina
Pocos saben que se trata de un invento argentino y menos saben quién fue su creador.

Enrique Ernesto Febbraro, el creador
del "Día del Amigo" (1924-2008).
El “Día del Amigo” es un invento del Dr. Enrique Febbraro que repetía, "un pueblo de amigos es una nación imbatible". Su inspiración llegó el 20 de julio de 1969, cuando prácticamente toda la humanidad se reunió delante de televisores o radios para ser testigos de una de las más grandes aventuras en la historia, el viaje del Apolo XI.

Enrique Ernesto Febbraro, un argentino nacido el 7 de julio de 1924, en el barrio porteño de San Cristóbal, era hijo único de Elvira Ruffo -ama de casa- y de Enrique José Febbraro-músico-, obtuvo sus títulos profesionales en la UBA. Radicado en Lomas de Zamora, tuvo dos hijos: Sergio y Gabriel, quienes le dieron cuatro nietos.

Socio fundador del Rotary Club de San Cristóbal de Buenos Aires, propuso la fecha del 20 de julio para compartir un gran momento con los amigos. Antes de que la Apolo 11 regresara a la Tierra, desde su consultorio de Lomas de Zamora, provincia de Buenos Aires, donde vivía entonces, Febbraro envió mil cartas a cien países proponiendo el día internacional del amigo y, a vuelta de correo, con 700 respuestas, había quedado fundado el “Día del Amigo”.

“Creo que la amistad puede pacificar naciones”, decía el Dr. Febbraro. Visitó organismos nacionales, gubernamentales, municipales, políticos, religiosos, personas notables y amigos para que adoptaran la idea y luego la difundieran en sus áreas de influencia.

Poco a poco fue logrando su cometido, primero fue el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires que con su decreto Nº 235/79 autorizó la celebración y le dio un marco legal. Luego se fueron sumando distintas entidades y extendiéndose por todas las provincias de la Argentina y por algunos países de América Latina.

Hasta que el 27 de abril de 2011, la Asamblea General de las Naciones Unidas resolvió finalmente invitar a todos los países miembros a celebrar el "Día Internacional de la Amistad".

Febbraro obtuvo contestación positiva de
muchas autoridades e instituciones,
menos de la NASA que nunca le respondió.
Paralelamente a su actividad profesional, la odontología, Febbraro se ocupó de difundir conceptos éticos y virtudes necesarias para una mejor convivencia, destacando el valor de la amistad y eligió como fecha simbólica el 20 de Julio, día del teórico primer alunizaje, para difundir el “Día Internacional del Amigo”, resaltando que la transmisión televisiva del Apolo XI había unido a todos los seres humanos en un mismo interés.

“Un amigo no da consejos, ayuda, acompaña”, definía Enrique Ernesto Febbraro, el hombre que inventó el “Día del Amigo”. Y completa: “la amistad es casta: si se mezcla con sexo, ya es otra cosa. Y tanto con un hombre, como con una mujer, tiene que estar fundada en el respeto”.

Febbraro enviudó dos veces de mujeres que empezaron siendo sus amigas y le dejaron lo que él llama su tesoro: dos hijos y cuatro nietos. De todo su anecdotario, Febbraro desnuda una pena: "Le escribí a la NASA, pero nunca me contestaron". Solía decir: “Jamás lucré con el Día del Amigo”. Era cierto. “Literalmente, se fundió” rememoran sus amigos.

Febbraro fue candidato dos veces al premio Nobel de la Paz.
Falleció el
4 de noviembre de 2008 a los 84 años y fue sepultado el 5 de Noviembre a las 9.30 en el Cementerio de La Chacarita.

Actualmente se celebra este día en unos cien países y está en la agenda del corazón de miles de personas que disfrutan de este día especial creado por un soñador.

Por Alberto Seoane

Entrevista a Enrique Febbraro

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